César, César
ayer cumplí cuarenta,
para entonces la vida ya no me gustaba
A cuatro mástiles de enero
hace mucho rato era una hoja más en el plumero
Y hoy
a pies de cruzar cada calzada
me palpo ciudadano. No estoy entero.
A César lo que es del César
Nunca me gustó la vida y a ti sí.
A esto hemos venido
y hasta aquí no más hemos llegado
pues de tu plaga tu hospital y tu jarabe
ya todo lo dolí.