Un poema disciplente, sin escrúpulos e insolente, para cada día de un año bisiesto. RUBEN CARCAMO BOURGADE
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Y eran los poetas de España quebrando campanas sublimes quemantes con trémolo con ojos con miedo Y yo rutinario viajando en mi tren pensando admitirlos sin saber por qué. Me duele tanto en España esos difuntos Me duelen no más los difuntos