Un poema disciplente, sin escrúpulos e insolente, para cada día de un año bisiesto. RUBEN CARCAMO BOURGADE
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Cuando el cuando no expresa la huella
ni el principio del camino
y está el horror de la página en blanco
que tanto confundió a Césare Pavese.
¡Ay!, ¡Cuándo mi vida, cuándo!