en el Verbo de las Comidas y las Bebidas de Chile
son expresiones de la inapetencia capital
de la hambreada intrínsica y congénita inanición
de la tripa tirillenta
que no logra superar la pureza del caldo de posta
ni el decoro de la sopa de lluvias
ni el pudor espeso de la crema de garbanzos
ni siquiera la traición del inmaculado consomé
Me lo confiesa
el veredicto popular del charquicán. Ni más ni menos.
